jueves, 30 de junio de 2011

La tilera del Barranco de Gisbert (Mosqueruela)

Tilo en invierno

          El barranco de Gisbert es uno de los afluentes del Arroyo Majo (Mosqueruela). El hidrónimo, que ha tomado de un mas que allí se encuentra, puede aparecer con diferentes formas según los autores: Gibert, Gilbert o Gisbert, pero probablemente proceda del apellido Gisbert de origen aragonés, que con la conquista cristiana se extendió rápidamente por el País Valenciano y Catalunya.

Hojas de álamo temblón
          Su cuenca tiene una extensión aproximada de 750 Ha. y está instalada sobre materiales del Cretácico Superior, sobre todo calizas dolomíticas, con tonos que varían del pardo amarillento al rojizo. El lecho del barranco está generalmente seco, aunque existen al menos dos fuentes pero con escaso caudal.

          Tiene su origen en el Alto de Molina a unos 1560 m de altitud, y después de recorrer algo más de 6 km, dibujando un arco alrededor del Alto de El Navajuelo (1544 m), acaba desaguando en el Arroyo Majo (1050 m) cerca del Mas del Morrón. A partir de la mitad del recorrido, el barranco se va encajando formando un cañón cuyas paredes septentrionales (la solana) son de una considerable verticalidad, mientras que la vertiente sur posee pendientes más suaves, lo que, unido a la situación de umbría, ha facilitado la extensión del bosque y algunas zonas de cultivos.

          Entre las masías de Gisbert y de las Celosías, a una altitud que oscila entre los 1200 y 1300 m, se ha mantenido alrededor de un pequeño torrente de este recóndito barranco, un reducto de la vegetación climática de Teruel, donde la presión humana, sobre todo el pastoreo que aquí se practica, ha sido suficientemente respetuosa con el mantenimiento de las especies autóctonas.



Tejo monumental
          El lugar umbrío, húmedo y de difícil acceso, ha favorecido el mantenimiento de un bosquecillo de frondosas caducifolias compuesto sobre todo por tilos, los más abundantes, y álamos temblones, junto con tejos, además de arces granadinos, avellanos, mostajos y acebos.

          Por lo escarpado del terreno, muchos árboles surgen de las paredes rocosas y existen varios ejemplares longevos y monumentales, tanto de tilos, álamos y tejos, como de acebos. Los tilos abundan en la parte media y alta del torrente, mientras que los tejos, álamos temblones y acebos prefieren la parte baja, cercana al lecho del barranco Gisbert.


Acebo
          Durante el otoño, la floresta se colorea de amarillo, naranja y rojo, en el invierno la hojarasca alfombra el terreno, y con la primavera vuelve el verdor frondoso.

          La zona está protegida al estar catalogada como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) del Maestrazgo y Sierra de Gúdar, por lo que no deben cortarse ni extraerse plantas.